La hernia inguinal es una de las patologías más comunes tratadas en el campo de la cirugía general, y en el Hospital Ruber Internacional contamos con los medios y la experiencia para abordarla de forma avanzada y segura. Afecta a millones de personas cada año y se produce cuando el contenido abdominal (grasa o intestino) atraviesa la pared a nivel de la ingle. El orificio inguinal permite el paso de estructuras esenciales, como el cordón espermático en los hombres o el ligamento redondo en las mujeres, pero puede volverse vulnerable si la pared abdominal se debilita, algo común en personas que realizan esfuerzos repetitivos o en aquellas con condiciones que incrementan la presión intraabdominal.

La incidencia y riesgos de la hernia inguinal

La alta incidencia de la hernia inguinal y su potencial para causar complicaciones hace que su diagnóstico y tratamiento a tiempo sea crucial. Aunque en un inicio puede ser asintomática, muchas personas comienzan a experimentar molestias, dolor o sensación de presión en el área afectada. Sin tratamiento, esta condición puede evolucionar y derivar en situaciones graves, como la estrangulación de la hernia, que requiere intervención urgente.

Innovación en el tratamiento: mallas y cirugía laparoscópica

La cirugía sigue siendo la solución principal para la hernia inguinal, y en el Hospital Ruber Internacional hemos adoptado técnicas modernas para optimizar los resultados y acelerar la recuperación de nuestros pacientes. Actualmente, el uso de mallas quirúrgicas y la cirugía laparoscópica han transformado la forma en que abordamos este procedimiento.

Según el Dr. Carlos Moreno Sanguino, especialista en Cirugía General y del Aparato Digestivo del Hospital Ruber Internacional, «Gracias al uso de mallas, que integran el tejido cicatrizal, y a las técnicas laparoscópicas, hemos logrado reducir significativamente las tasas de recurrencia y ofrecer una recuperación más rápida y segura».

El Dr. Moreno explica que las mallas brindan un refuerzo en el área debilitada, ayudando a prevenir una nueva protrusión. Al estar hechas de materiales que se integran con el tejido cicatrizal, estas mallas contribuyen a una solución duradera y con menor riesgo de recurrencia.

La importancia de un enfoque personalizado

Priorizamos un enfoque personalizado para cada paciente. Cada caso es diferente, y el estado general de salud, la edad, y el estilo de vida del paciente juegan un papel fundamental en el diseño de un plan quirúrgico adecuado. La experiencia y la tecnología avanzadas permiten ofrecer una atención de alta calidad, adaptando las técnicas quirúrgicas en beneficio de la seguridad y el bienestar del paciente.